El cuidado de nuestro parque implica tomar medidas de prevención y estar atentos a distintas cuestiones para facilitar el momento de la poda de árboles.
SEGURIDAD Y PODA DE ARBOLES: IDENTIFICAR ARBOLES PELIGROSOS
Reconocer árboles peligrosos es clave para prevenir accidentes y proteger a las personas y propiedades. La importancia de detectar árboles riesgosos radica en los graves daños e lesiones que pueden causar.
Las ramas caídas o árboles derrumbados pueden herir a personas, dañar edificaciones e interrumpir líneas eléctricas. El primer paso es identificar los defectos de un árbol, observando signos que indiquen problemas.
Al notar estos indicadores, se puede evaluar si el árbol necesita inspección profesional:
- Inclinación excesiva: puede señalar raíces debilitadas, inestabilidad o problemas estructurales.
- Grietas profundas: indicios de descomposición o debilidad interna que afectan la integridad del árbol.
- Caries y descomposición: cavidades o áreas descompuestas que debilitan el árbol, haciéndolo propenso a caer.
- Ramas muertas: representan un peligro inminente, pueden caer en cualquier momento y dañar a personas o propiedades.
- Uniones débiles entre ramas: conexiones inestables que pueden romperse, especialmente en vientos fuertes o tormentas.
INSPECCION DE LA COPA DE LOS ARBOLES
Examinar la copa de un árbol es fundamental para evaluar su salud y estabilidad. Aquí se presentan aspectos clave a considerar durante esta inspección:
- Follaje escaso: un dosel delgado puede señalar descomposición interna o daño en las raíces.
- Ramas muertas: presencia de ramas secas o quebradizas que indican falta de vitalidad y aumentan el riesgo de caídas.
- Señales de infestación de plagas: árboles infestados por insectos pueden mostrar agujeros inusuales, residuos parecidos a serrín o hojas anormales.
- Crecimiento de hongos: la aparición de hongos en el tronco o raíces indica descomposición interna que compromete la integridad estructural.
EVALUACION DEL SISTEMA RADICULAR
Es crucial reconocer la relevancia de un sistema de raíces saludable para la estabilidad de un árbol.
La inspección de estas raíces juega un papel fundamental en la evaluación de la salud general del árbol y su potencial como peligro:
- Raíces expuestas: cuando las raíces están sobre la superficie del suelo o han sufrido daños, pueden comprometer la estabilidad del árbol.
- Presencia de hongos: el crecimiento de hongos alrededor de la base del árbol puede ser señal de descomposición de las raíces u otros problemas subyacentes.
- Cambios en el suelo: levantamientos o depresiones cerca de la base del árbol pueden indicar problemas en las raíces o una estabilidad comprometida.
BUSCAR ASISTENCIA PROFESIONAL
Si bien es cierto que estar alerta a las señales de árboles riesgosos es valioso, es esencial recordar que el diagnóstico y la evaluación precisos deben ser realizados por arbolistas certificados o profesionales del cuidado de árboles.
Cuando surjan dudas, consultar a estos profesionales es la opción ideal para asegurar la identificación adecuada de árboles peligrosos y tomar las medidas correspondientes.
EL MANTENIMIENTO DE LOS ARBOLES Y LAS INSPECCIONES PERIODICAS
El mantenimiento regular y las inspecciones periódicas son fundamentales para prevenir peligros relacionados con los árboles.
Aquí hay algunas ventajas importantes de cuidar activamente los árboles:
- Detección temprana de problemas: las inspecciones regulares permiten identificar problemas en los árboles en etapas iniciales, lo que facilita la intervención oportuna.
- Fomento de la salud arbórea: la poda, fertilización y otras prácticas de mantenimiento mejoran la salud general de los árboles, fortaleciendo su resistencia contra enfermedades y plagas.
- Mejora de la seguridad: los árboles bien mantenidos reducen el riesgo de caídas de ramas o árboles debido a posibles defectos.
- Conservación del valor de la propiedad: los árboles saludables y bien cuidados embellecen la estética de cualquier propiedad y contribuyen a su valor general.
LA SEGURIDAD DE LOS PROFESIONALES DURANTE LA PODA DE ARBOLES
El equipo de protección personal, como gafas, guantes, sombreros, zapatos resistentes, camisas de manga larga y pantalones largos, resguarda a los trabajadores de múltiples riesgos durante la poda.
En ocasiones, el uso de una máscara contra el polvo puede ser necesario para evitar la inhalación de partículas durante el corte, triturado o aserrado de ramas y follaje.
Otro peligro importante durante la poda son las herramientas de corte necesarias para realizar el trabajo, como cuchillas, sierras, yunques, cizallas, tijeras eléctricas o manuales, entre otras.
Para prevenir lesiones, es crucial seguir prácticas seguras de manejo de herramientas, mantenerlas y almacenarlas correctamente, además de usar guantes protectores.
Es por eso que en Poda de Árboles priorizamos la seguridad en cada etapa para prevenir accidentes y lesiones tanto para los trabajadores como para el entorno.